En un hito para la educación nacional, el colegio Honorio Delgado Espinoza de Arequipa se convirtió en el primer plantel escolar del Perú en albergar un TecsupLab, un laboratorio de fabricación digital que está revolucionando cómo los adolescentes aprenden tecnología.


Un salto cuántico en educación
El laboratorio, implementado por Tecsup, está equipado con:
- 🖨️ 3 impresoras 3D de última generación
- 🔪 Cortadora láser para prototipado rápido
- 🖥️ Estaciones de diseño con Fusion 360 y AutoCAD
- 🤖 Kits de programación e inteligencia artificial
«Queremos que los chicos no solo usen tecnología, sino que la creen«, explicó Gino Galli Cepeda, director comercial de Tecsup, mientras observaba a un grupo de estudiantes diseñar sus primeros prototipos de robots.
Más que herramientas: un nuevo modelo educativo
El proyecto va más allá de instalar equipos:
- Capacitación docente: 12 profesores del colegio fueron entrenados por 6 meses
- Metodología STEAM: Integra ciencia, tecnología y arte en proyectos reales
- Emprendimiento tecnológico: Los alumnos desarrollarán productos comercializables
Jesús Medina, profesor a cargo del laboratorio, mostró orgulloso los primeros resultados: «Tenemos estudiantes de tercero de secundaria que ya programan brazos robóticos. El año que viene competirán en ferias internacionales».
Por qué este colegio hizo historia
La selección del Honorio Delgado no fue casual:
✔️ Tiene 8 años implementando robótica educativa
✔️ Ganó 3 competencias nacionales de innovación
✔️ 70% de sus egresados eligen carreras STEM
Cecilia Jarita, gerente regional de Educación, destacó: «En el Perú solo existen 25 laboratorios como este, y todos estaban en universidades. Hoy los escolares arequipeños tienen ventaja».
El impacto en números
- 📈 1,200 beneficiados directos
- ⏱️ 10 horas semanales de talleres prácticos
- 🚀 15 proyectos en desarrollo (incluyendo un satélite educativo)
¿Qué viene después?
Tecsup ya negocia con:
- 5 colegios de Moquegua y Tacna
- El Ministerio de Educación para replicar el modelo
- Empresas mineras que financiarían nuevos laboratorios
«Esto no es un laboratorio, es una fábrica de oportunidades», resume Kevin (16 años), quien ya diseña prótesis 3D para mascotas.
Mientras Arequipa se consolida como polo tecnológico educativo, el mensaje es claro: El futuro de la educación peruana se escribe con innovación, y acaba de encontrar su modelo a seguir.
Creo en Dios sobre todas las cosas.
Orgulloso padre, arquitecto, diseñador y fotógrafo con una pasión por la tecnología y los deportes. En mis tiempos libres, disfruto cazando zombies mientras busco La Chispa Suprema.